Sitges 2007 : Zombies y falsos documentales
Después de pasearnos un año más por el Festival Internacional de Cinema de Catalunya y sufrir ahora la típica depresión post festivalera, aún nos quedan fuerzas para contaros todo lo que hemos podido disfrutar en esta 40 edición plagada de muertos vivientes.
Un año más el Festival Internacional de Cinema de Sitges ha demostrado que el fantástico no ha muerto y que cada vez son más los espectadores que llenan sus salas y se agolpan horas antes de las proyecciones a hacer colas infinitas (esto no pasaba años atrás). Con las entradas agotadas para la ceremonia de inauguración y clausura, la programación prometía ser una auténtica locura de idas y venidas por la cantidad de películas interesantes que se pasaban este año. Rec, Diary of the dead, The Fall (ganadora del festival) o À l'interiéur, fueron las películas más aplaudidas por el público y la crítica, y no es para menos.
Jaume Balagueró y Paco Plaza abrían el festival con su nuevo proyecto Rec, una película de terror presentada como un falso documental protagonizado por la reportera de Cuatro Manuela Velasco. Balagueró y Plaza consiguieron meternos a todos el miedo en el cuerpo en ta solo 85 minutos, corto pero intenso, tan brutal como los mordiscos que reciben sus protagonistas, un grupo de reporteros de televisión encerrados en un edificio de Barcelona cuyos vecinos sufren una extraña infección que los vuelve altamente violentos. Rec es la muestra de que el cine español también es capaz de asustar. Bien merecido pues el premio a la mejor dirección que les otorgó el jurado del festival.
Otro de los platos fuertes del festival y una de las películas más esperadas era Diary of the dead, el nuevo film del maestro Gerorge A. Romero, quien se paseó por las instalaciones haciéndose fotos con sus seguidores en una actitud más que loable a sus 87 años. El abuelo que todos queremos tener nos dio una lección de cómo hacer una película de zombies con mensaje sin perder ese toque gore y cómico que arrastra desde La noche de los muertos vivientes. Sin duda, Diary of the dead fue una de las sorpresas anunciadas del festival, una producción independiente que demuestra que los buenos directores nunca mueren y que los muertos vivientes no corren.
Y precisamente los zombies volvieron a ser protagonistas de lo mejor del festival: los maratones. Los horarios imposibles programados por algún desalmado te hacen ir arriba y abajo a contrarreloj, sales de una sala y no llegas a la otra (ya no digamos si tienes que ir del Retiro al Auditori). Para eso la ¿magnífica? organización creó las sesiones de 3 o 4 películas non stop para los amantes de las emociones fuertes y con problemas para conciliar el sueño. Este año Flight of the living dead, Mulberry Street, Zombie Diaries y The Rage fueron las películas programadas para la sesión más freak del festival. A destacar únicamente la primera de ellas, una especie de Serpientes en el avión pero muchísimo más divertida, loca y gore hasta la saciedad, un despropósito para el cine de serie B que demuestra en esta película cuáles son las maneras más bizarras y eficaces de matar a un zombie a 4000 metros de altura.
De maratón en maratón llegamos a la reservada para Grindhouse uno de los platos fuertes del festival. Desde la 1 de la madrugada del viernes y hasta las 5 de la mañana del sábado el Auditori se llenó de fans de Quentin Tarantino y Robert Rodríguez que no tuvieron suficiente con ver las dos películas por separado cuando se estrenaron y volvían a Sitges a por más. En una sola dosis directa a la médula, los fake trailers eran la verdadera esencia de la sesión doble.Así Thanksgiving de Eli Roth, Don’t de Edgar Wright y Werewolf Woman of the S.S de Rob Zombie, fueron el aperitivo servido entre la tremenda Planet Terror y la trepidante Death Proof. Sin duda una proyección que no se volverá a repetir en nuestras salas, y mucho menos con la compañía de dos de las protagonistas del film, Zöe Bell y Sydney Tamiia Poitier quines aguantaron estoicamente la sesión íntegra.
Y ya tenía razón el director del festival cuando nos anticipaba que À l'interiéur era de lo más gore que había pasado por sus manos... La opera prima Alexander Bustillo y Julien Maury presenta a una mujer embarazada a punto de dar a luz la noche de Navidad, sola en una casa en la que se cuela una extraña mujer vestida de negro. Los directores franceses consiguieron hacernos pasar un mal rato mientras un escalofrío nos recorría la espalda emulando al Alexander Aja de Alta tensión. Absténganse todos aquellos con estómagos sensibles e instintos maternales.
Y para terminar el recorrido por lo más destacable del festival (aunque nos dejamos pelis como The Signal, Los Cronocrímenes o Wrong Turn 2) nada mejor que la ganadora del festival The Fall. Y aquí es cuando ya no quedan palabras para describir el trabajo que hace Tarsem Singh en esta película, realizador de la menospreciada La Celda. The Fall es una auténtica maravilla en todos los sentidos, una lección de fotografía, guión, interpretación y cualquier concepto que pueda hacer referencia a la belleza y grandiosidad del cine. Los protagonistas de la cinta, una niña de 5 años y un especialista de cine que ha sufrido un accidente que no le permite moverse de la cama de un hispital, nos acercan una de las historias más bonitas desde La princesa prometida. The Fall fue sin duda lo mejor de un festival que cerró su 40 edición como una de las mejores de los últimos 5 años, demostrando que la imaginación es un don inagotable al alcance sólo de unos pocos privilegiados.
4 comentaris:
the Fall es la mejor película que he visto este año. La sensación de Maravilla es constante. No la dejeis escapar. Perfecta!
Yo tmb quiero ver The Fall, me acompañáis?
dios, te leo y me entran ganas de ir, aunque ya de antemano sepa que me podria morir de un ataque de corazón en cualquier momento...
:)
humm... pues cuando vuelva a barcelona voy a tener que bajarme The Fall a ver si es tan buena como decís... (en imdb le dan un 8.5, aunque sean solo 235 votos... pero eso ya es algo :))
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